Una casa de finales del siglo XIXº rodeada de un bonito jardín, cerca de Pacy-sur-Eure, ha hecho feliz a Estelle. Esta fan de la decoración, gracias ha sus hallazgos y sus creaciones, ha devuelto el alma a la casa. Estelle, vivía en Paris, soñaba con volver a su Normandía natal, encontró después de haber visitado muchas casas, esta joya que la sedujo por su jardín,un jardín invadido por toda suerte de plantas y árboles y lo que le sedujo hasta la médula, fue la vidriera del anexo de la casa, donde ahora está la cocina.
En origen, la casa estaba compartimentada en pequeñas piezas, lo primero tiró muros, para a un lado y el otro de la escalera, una gran cocina y un enorme salón para la convivencia, un espacio abierto completan la planta baja.
La cocina se ha emplazado en el antiguo taller, iluminada por grandes ventanales, un mueble de estantes delimita el espacio con el comedor. La luminosidad se acentúa por los tonos claros y empolvados que visten los muros y el techo. Abrir la casa sobre el antiguo taller y sus cristalera, ha sido un espectacular y precioso acierto, eje principal de la metamorfosis de esta casa, enteramente imaginada por la propietaria.
Toda la casa se ha decorado, con «Hallazgos» de Estelle, objetos que ha devuelto con acierto a lo cotidiano, también de sus creaciones realizadas por ella o su boutique.
En la prolongación de la cocina, el espacio comida se refleja en un gran espejo, decorado con pequeñas casitas de papel.
La gran cocina que da al jardín es la guinda del pastel el centro neurálgico de la casa.
La escalera no ha sufrido transformaciones, el eje conductor hacia los dormitorios del segundo piso.
Suaves tonos y sanitarios a la antigua, donde se respira el mismo aire de elegancia romántica como en el resto de la casa.
Linea de cama de lino, cartel vintage que hace de cuadro, silla de estilo industrial que hace de mesilla de noche. El dormitorio ofrece una decoración muy mezclada, pero reforzada por los objetos de gran personalidad.
Encanto y tonos de humor, en el dormitorio del niño, dominan los tonos claros que se alegran con tonos rojos.
Estelle ha instalado su taller en la buhardilla, desde donde realiza sus objetos que distribuye por internet, Mô by Maurice.
Campagne Chic&Broc, nº24.