Estas granjas que se encuentran en algunas regiones ricas en cultura se organizan en dos partes divididas a lo largo. En una zona la cocina y la sala común y en la zona posterior los dormitorios. Otra zona para los establos, entre estas dos partes un pasillo conduce a las habitaciones superiores.
Gallinero, granero, estancias para los animales, se adosan sin ninguna regla arquitectónica precisa, solamente protegerse del viento, del frío y del calor. Siempre están orientadas al sur para beneficiarse del sol, pero sobre todo del mistral, las ventanas orientadas al norte son estrechas.
Esta antigua granja provenzal, se ha restaurado respetando su pasado y consiguiendo un toque campestre sin renunciar al confort actual. Entre la entrada y el salón, el tono cobre de los baldosines en barro cocido, los muros blanqueados y el mobiliario elegido, crean un ambiente de casa de campo refinada.
Techo encalado con las vigas blanqueadas, mobiliario comprado en brocantes, la chimenea patinada en tono gris, dan a este salón provenzal una atmósfera delicada respetando su antigüedad.
El dormitorio principal es un ejercicio de estilo típicamente provenzal, con su suelo de baldosines hexagonales en barro cocido, sus muros encalados en un suave tono nube, el cabecero de obra en el mismo tono gris que las puertas de los armarios y vestida la cama con colchas en piqué con los tonos típicos provenzales en rojo, beig y marfil.
Típico ambiente provenzal en la cocina, los muros encalados en un tono ocre, los armarios son de obra y las puertas antiguas patinadas en gris blanquecino, encimera de mármol grueso, una mesa de trabajo y sillas rústicas componen una atmósfera alegre.
Les secret des belles maisons. Art&Decoration.
