En esta cocina, un magnífico mueble de oficio, este en realidad se utilizaba para guardar el grano, clasificarlo y venderlo. Se ha pintado de un azul intenso que resalta la numeración, la encimera se resuelve con una maciza placa de mármol, se transforma en una excelente zona de trabajo, funcional y elegante.
La mesa de trabajo de un mecánico de 1940, en hierro y madera, se sigue utilizando de despacho. Asociada a una silla pivotante industrial, aporta un carácter auténtico y personal.
Antiguo y elegante mueble clasificador, se ha impuesto en el cuarto de baño, asociado a una decoración con piezas de Thonet, que desvela el buen hacer de este artesano durante siglos.
