Perdura la tradición, el pardalot, ofelia aparici

Tipicamente bretona, esta casa de campo dotado de un cuerpo principal que data del siglo XIXº, ha conocido diversas modificaciones. En los años 1990, la casa ha sido agrandada a 180 metros cuadrados, importantes trabajos se han realizado en 2012, modificación de aberturas, la creación de una inmensa terraza cubierta, adosada a la fachada para conseguir, una generosa entrada de luz.

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Cuando Sophie y Romain adquirieron la casa, estaba en muy buen estado. Pero, tenían la necesidad de ajustarla y dar su toque personal, para sentirse como en casa. Han reorganizado la distribución de espacios interiores para agrandarlos y comunicar ciertas piezas. En la entrada, se asocian materiales antiguos como las baldosas de barro cocido del suelo con las grandes puertas acristaladas tan actuales y funcionales.

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Perfectamente integrada con la fachada original, la veranda o terraza acristalada, en un espacio muy agradable, muy utilizado en otoño e invierno para seguir disfrutando del jardín al abrigo del frío. La decoración sencilla, con el entorno es más que suficiente.

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«Adoro la mezcla de objetos modernos y objetos comprados en mercadillos, tengo pasión por los almohadones, mezclar diferentes estampaciones» Dice la dueña. Independientemente de la decoración, lo esencial, que maravillosamente practican los franceses, es no perder la esencia de estas casas, recuperar materiales nobles, piedra, madera, barro, el espíritu y calidad de antaño nunca se pierde.

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Se ha suprimido el muro de separación entre el salón y comedor, de esta manera se obtiene un espacio abierto funcional y moderno. Butacas de «Abaut chairs», mesa de Du bout monde. Lámpara diseñada por Ferruccio Laviani.

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Espíritu actual, el dormitorio principal en tonos oscuros, el cabecero se ha hecho a medida en madera de wengé, ropa de cama de zara home, cuadro de Luisa Popenko.

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Todo ha sido estudiado para guardar el volumen y la luz, la decisión del color de los muros ha sido difícil, queríamos salir de todo blanco, apartar el estilo «Al borde del mar», decidimos integrar en una paleta de tonos claros, toques de negro para obtener una atmósfera moderna y tranquila.

 

 

 

Art&Décoration, nº 524

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