En una puerta plegable,contra ventanas de lamas, Marie Caroline ha colgado se guirnaldas de luces, lazos de tafetán y sobre la mesa velas y más velas.
Un saco de tela de esparto y una corona de hojas de parra, hacen un rincón encantador.
Marie Caroline, tiene una colección de manuscritos antiguos, que los presenta en Navidad con otros objetos recuperados, como un sueño encantedo.
En la estantería Napoleón III patinada en blanco, Marie Caroline ha colocado su colección de copas de cristal, con caramelos, galletas, y multitud de pequeños objetos que posee.
La entrada de la casa es una verdadera puesta en escena, atmósfera fascinante y vagamente decadente.